¿Comer carne de pollo es malo?
Mitos relacionados con la avicultura
La avicultura ha sido una víctima más de los rumores y la desinformación, y por esta razón existen multitud de mitos falsos a su alrededor, que aún hoy, la gente cree.
Realidad: La realidad es que el pollo es uno de los alimentos más demandados en todo el mundo con un alto valor nutricional, un contenido muy importante de vitaminas y minerales, un precio accesible, y una gran versatilidad culinaria enorme.
Científicos, expertos y profesionales advierten que el uso de hormonas en la industria avícola es solo un mito debido a que tal tipo de hormona ni siquiera existe en el mercado.
El pollo es un animal que tiene una extraordinaria capacidad de crecimiento, por esta razón se sacrifica siendo muy joven, esto hace imposible que las hormonas sean asimiladas por las aves en un periodo de vida tan corto.
Si hablamos de la década de los 50, un pollo era alimentado durante 100 días para alcanzar un peso de 2,1 kg. A finales de los 60 se redujo el tiempo a 67 días, y en la actualidad está listo para salir al mercado entre los 42 y los 45 días.
La razón principal de una carne de mayor tamaño se debe a mejores estrategias de cría, selección genética y tecnología en nutrición durante décadas. En otras palabras, los pollos están creciendo a un ritmo acelerado gracias a mejores prácticas y alimentación.
Diariamente salen al mercado miles de pollos en todo el mundo, por lo que el hecho de inyectarles hormonas requeriría procesos muy complejos y muchas personas para hacer esta labor. Así, los costos operativos se elevarían al punto en que el precio final sería impagable para la mayoría de los consumidores.
Lo que sí es cierto es que este mito ha generado un gran impacto negativo en la población porque impide su consumo, privandola de una valiosa proteína como es el pollo.
El mito de las hormonas causa daño económico a la industria avícola organizada.
Esta falsa creencia atenta contra el trabajo, los avances tecnológicos y el compromiso que tiene el sector avícola con ofrecer un producto de alta calidad a los consumidores.
Realidad: En general, las gallinas producen un huevo cada 25 o 28 horas, lo cual depende de la edad del ave. No es posible que por medio de la luz se pueda manipular este proceso biológico, es algo que sucede de manera natural en ellas.
Realidad: Evidentemente el huevo de gallina es el más consumido, no obstante, existen otros tipos de huevos que se pueden consumir y que son igual o incluso pueden llegar a ser más nutritivos, como por ejemplo los huevos de codorniz.
Es importante mencionar que todos los huevos contienen los nutrientes necesarios y que son un alimento muy completo, con proteínas de alto valor biológico, vitaminas y minerales.
Realidad: La cáscara del huevo no contiene ningún compuesto tóxico ya que está compuesta en un 95% por calcio y ejerce una labor de protección en el interior.
Lo que sí es cierto es que, a lo largo de toda la cadena de suministro, los diferentes actores se encargan de garantizar la inocuidad, desde la producción hasta el consumidor final.
Los productores de huevos aplican sistemas de prevención y control de la salmonella, y las empresas avícolas emplean programas intensos que abarcan las unidades de producción, el transporte, instalaciones e inspecciones para la comercialización de este producto.
Realidad: Hoy en día, se habla mucho del tipo de producto que estamos consumiendo, es por esto que se han puesto de moda tantas clases de huevo.
Sin embargo, si retrocedemos al proceso de producción avícola, nos daremos cuenta de que no hay aves especiales, todas las gallinas en su ciclo productivo especialmente al inicio pueden producir huevos de doble yema o con tamaños fuera de lo normal. Todo esto varía dependiendo de la edad del ave, es decir, entre más joven es, producirá huevos de mayor tamaño. Algo parecido pasa para los huevos de doble o triple yema.
Lo que sí es cierto es que el área potencialmente disponible y el uso deseado del espacio dan como resultado diferentes densidades de población que pueden afectar potencialmente la uniformidad del peso corporal del ave, y por lo tanto, el tamaño de los huevos.
Se ha demostrado que las gallinas ponedoras tienen un muy buen rendimiento en los sistemas de producción de aviarios de varios niveles. Los productores se benefician al poder tener más aves por metro cuadrado, lo que puede incrementar aún más el retorno de la inversión.
Impacto de la Influenza Aviar en el sector avícola - LEER MÁS
Tips sobre la gallinaza, un subproducto de valor agregado - LEER MÁS
Zucami, a la vanguardia de las comunicaciones digitales - LEER MÁS
Síndrome de caída de postura (EDS) en gallinas - LEER MÁS
Tips sobre pautas de manejo de bebederos y comederos en aviarios. - LEER MÁS
Tips para favorecer el adecuado desarrollo de las gallinas - LEER MÁS
Tips sobre la producción de codornices - LEER MÁS
Tips sobre el desarrollo de la pollita - LEER MÁS
Tips sobre el hueso de la ponedora y la calidad de la cáscara del huevo - LEER MÁS
Tips sobre el traslado de gallinas a la nave de puesta en aviario - LEER MÁS
Reducir los huevos fuera de nidal - LEER MÁS
Entrevista ZUCAMI Pedro Ansoain - LEER MÁS
CONTACTO
© ZUCAMI POULTRY EQUIPMENT Pol. Morea Norte, Calle C - Nº2 · 31191Beriain (Navarra - España)
+34 948 368 301 | contact@zucami.com